domingo, 27 de octubre de 2013

Día de Muertos


La fiesta que celebramos los días 1 y 2 de Noviembre tiene orígenes prehispánicos. En todas las culturas del México antiguo (Mayas, Olmecas, Mexicas, etc.) la muerte ocupaba un lugar muy importante.  Los Nahuas o Mexicas llamaron Mictlán a ese lugar.
                         

Mictlantecuhtli y Mictecacíhuatl,
Señores del Inframundo o Mictlán
A Mictlán van todos los muertos sin importar como se portaron en este mundo (es decir, no existía el concepto de "buenos" y "malos", por lo tanto no se trataba de premios y castigos). Sin   embargo, no todos los muertos eran iguales. Muchos de ellos se convertían en dioses, según hubiera sido su muerte. Los guerreros muertos en combate, se convertían en aves de plumaje muy colorido, que tenían la misión de acompañar al sol en su recorrido diario, especialmente al amanecer y en el atardecer.                         

Las mujeres que morían en su primer parto, recibían el nombre de Cihuateteo, y también tenían un lugar especial en el Mictlán. De esa manera los Mexicas rendían homenaje, tanto a la guerra como a la fertilidad (no debemos olvidar que fueron una civilización fundamentalmente guerrera). Los sacrificios humanos, también tenían una función ritual. Los prisioneros de guerra eran sacrificados porque pensaban que el sol necesitaba alimentarse con sangre para que tuviera la energía necesaria para que continuara su movimiento.


El viaje a Mictlán era peligroso. Los muertos tenían que atravesar un río muy profundo, escalar montañas, pelear con fieras salvajes, etc. Por eso, cuando moría una persona era enterrada con un ofrenda, que consistía en cuchillos de obsidiana, comida y bebida suficiente para el viaje, un perro que los acompañara, y si el muerto era un personaje importante, lo enterraban con algunos sirvientes.

Durante la colonia, los misioneros cristianos trataron de erradicar esta costumbre. Lo único que consiguieron fue modificarla. La hicieron coincidir con la fiesta religiosa de "Todos los Santos".  Pero en la conciencia de los indígenas quedaron restos de su tradición original.

La celebración actual conserva todavía el concepto de que los muertos no "mueren", sino que solamente se fueron a vivir a otro lado, y pueden recorrer el camino de regreso si tienen la comida suficiente para soportar la caminata. Por eso se ponen ofrendas en las casa. Es una forma de estimular a los seres queridos para que vengan a visitarnos de vez en cuando, esta es una idea que se contrapone con la idea universal de que los muertos "asustan".   Las personas que amamos cuando vivían jamás podrán hacernos daño, y la mejor manera de recordarlas es invitándola a comer lo que a ellas más les gustaba. Esto sólo se da en México.

Los Altares

Existen muchas formas de realizar altares de muertos, la más sencilla la suele hacer mucha gente dentro de sus casas ya que sobre una mesa cubierta con un mantel se pone una fotografía de la persona fallecida, y se adorna con flores y algunos recuerdos.

Otros altares son realizados según la tradición, donde se establece que el altar debe de constar de 7 niveles o escalones que representan los 7 niveles que tiene que pasar el alma de un muerto para poder descansar. Estos altares se realizan en lugares donde existe un espacio donde pueda caber todo el altar, el cuarto donde esté al altar debe ser barrido con hierbas aromáticas hacia los cuatro vientos un día antes del día de muertos.


 Los Escalones


Primero se pone la foto del santo o virgen de la devoción 
Segundo es para las ánimas del purgatorio
Tercero se pone la sal para los niños del purgatorio.
Cuarto se pone pan llamado "pan de muerto", este pan es adornado con azúcar roja que simula la sangre, se recomienda que el pan sea hecho por los parientes del difunto, ya que es una consagración.
Quinto se pone la comida y la fruta que fueron los preferidos por el difunto.      
Sexto se pone la foto del difunto a quien se dedica el altar.
Séptimo (último)  se pone la cruz de un rosario hecho de tejocote y limas.


Las ofrendas que se ponen dentro del altar son las siguientes:

    Cadenas de papel morado y amarillo que significan la unión entre la vida y la muerte.
   Papel picado que da colorido y alegría de vivir.
   Las flores son la bienvenida para el alma, la flor blanca representa el cielo; flor amarilla, la tierra y la morada el luto. 
  Velas que con sus llamas representan la ascensión del espíritu. También significan luz, guía del camino.

Lienzo blanco y nuevo que representa la pureza, el cielo.
 El cirio representa el alma sola.
Incienso de copal cuyo humo simboliza 
el paso de la vida a la muerte.
 El maíz representa la cosecha.
 Las calaveras de azúcar que son 
  una costumbre indígenas.
El agua que da vida y energía para 
  el camino. 
Fotografía de la persona a quien se dedica el tributo.
Las frutas son la ofrenda que nos brinda   la naturaleza. Generalmente son cañas de azúcar, naranjas, tejocotes y jícamas.
Un camino desde la puerta de la entrada hasta el altar formado con flor de cempasúchil.
 Una vara para liberar al muerto del demonio y los malos espíritus
  Los platillos con las que se trata de agradar el difunto compartiendo los alimentos que le gustaban.
    Un Cristo para que haya bendiciones.
    Una cruz de cal que simboliza los 4 puntos cardinales.
    Sal para que el cuerpo no se corrompa.
    Objetos personales del difunto.
      Las personas velan durante la noche en la tumba esperando que el espíritu de su muerto baje y disfrute de su ofrenda.

1 comentario:

Solo Recetas dijo...

Viva mexico di señor :)